Novozymes cree que el futuro del negocio de las enzimas está en el etanol producido con biomasa: el INTA también se anotó en esa carrera
Un recurso que tendrá cada vez mayor importante en la generación de biocombustibles.
La compañÃa biotecnológica danesa Novozymes –la mayor desarrolladora mundial en enzimas industriales– tiene la mayor parte de sus apuestas concentradas en el negocio de etanol elaborado en base a celulosa.
Peder Holk Nielsen, CEO de Novozymes, proyectó que en 2030 el 90% de los ingresos de la compañÃa podrÃan provenir de la industria elaboradora de etanol.
“Si el mundo realmente quiere asegurar que una parte significativa del consumo de combustibles lÃquidos se origine a partir de biomasa, eso transformarÃa totalmente el negocio de las enzimasâ€, dijo Holk Nielsen a la agencia Bloomberg.
En 2012 Novozymes facturó unos 2010 millones de dólares, de los cuales apenas un 16% provino de la comercialización de enzimas destinadas a elaborar etanol en base a maÃz (la mayor parte se genera por enzimas destinadas a las industrias de productos de limpieza, bebidas y alimentos).
La producción de etanol en base a celulosa actualmente no es viable en muchas situaciones por el elevado costo de las enzimas industriales que se utilizan para transformar la celulosa en glucosa (que es el azúcar que necesitan posteriormente las bacterias para fabricar alcohol).
Por ese motivo, investigadores argentinos del INTA están trabajando –con presupuestos mucho más acotados que los de sus pares europeos– en el desarrollo de enzimas locales con capacidad para degradar celulosa. La idea es que tengan un costo mucho más accesible.
El proyecto más ambicioso al respecto consiste en realizar metagenómica de suelos de bosques nativos de la zona chaqueña. “Llevamos a cabo un screening para detectar genes que codifican enzimas con capacidad para degradar celulosa, algo esperable en un ambiente boscoso, en el cual proliferan las bacterias adaptadas para alimentarse de residuos de árbolesâ€, indicó Esteban Hopp, coordinador del Ãrea Estratégica de BiologÃa Molecular, Bioinformática y Genética de Avanzada del INTA en el Instituto de BiotecnologÃa del CICVyA.
“Algunos de los genes detectados eran diferentes a los ya patentados en el ámbito internacional y, por lo tanto, son viables de ser desarrolladosâ€, añadió Hopp en un artÃculo reciente publicado por la Revista CREA.
El INTA pretende que una tecnologÃa de tales caracterÃsticas pueda emplearse en muchas regiones del paÃs, para que haya, en un futuro, pequeñas plantas de etanol que empleen los recursos locales de la manera más eficiente posible tanto en términos económicos como ambientales. El objetivo es que cada región del paÃs utilice sus propios residuos de celulosa para generar etanol. Por ejemplo: bagazo de caña en el NOA o cascarilla de arroz en el NEA. “Eso serÃa mucho mas eficiente y contribuirÃa a promover el desarrollo de las diferentes regiones argentinasâ€, apuntó Hopp.