Para Macri la lecherÃa es uno de los sectores que demuestran que “crecer depende de nosotros y de nuestra capacidad de sentarnos a dialogarâ€
“Nos dimos cuenta de que no sirve seguir culpando a otros de lo que nos pasa. Que crecer depende de nosotros y de nuestra capacidad de sentarnos a dialogar en una mesa, sin patoterismos ni extorsiones. Ya demostramos que se puede. Lo hicimos con Vaca Muerta, con la lecherÃa, con la carne, con la construcción, con el sector automotriz, con el sector forestal y con la biotecnologÃaâ€. Asà lo indicó hoy el presidente Mauricio Macri en el discurso de apertura del 136° perÃodo de sesiones ordinarias del Congreso.
La cuestión es que la situación de la lecherÃa está bastante lejos de tratarse de un sector en crecimiento. La producción argentina de leche en 2017 fue de 9010 millones de litros, una cifra 8,9% inferior a la de 2016 y la más baja de la última década, según estimaciones realizadas por CREA en base a datos de la variación mensual a tambo constante publicados por el Ministerio de Agroindustria de la Nación.
En los últimos cinco años cerraron 677 tambos, según datos del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (Ocla). El dato es que un 30% de esa caÃda (207 cierres) se registró en 2017, mientras que el 50% de la misma (340) ocurrió en los últimos dos años.
El pasado lunes, en el marco de la reunión que representantes de los tamberos mantuvieron con el presidente Mauricio Macri, la única medida que lograron obtener fue la restitución de la disminución de cinco puntos en la percepción de IVA vigente para la entrega de leche fluida a industrias lácteas (pasando del 6% al 1%), la cual habÃa sido descontinuada el 30 de junio de 2017.
En la primera reunión mantenida con Macri en noviembre del año pasado, el presidente, cuando le plantearon que los costos de producción de la leche en muchas situaciones superaban a los precios obtenidos, recomendó que “bajen los costos†(en la última reunión se limitó a no emitir una opinión al respecto).
Cálculos realizados por técnicos del INTA muestran que en el último año las empresas lecheras de mayor escala cuentan con márgenes favorables, mientras que los tambos medianos y pequeños pierden cantidades crecientes de dinero. En el actual escenario, una polÃtica de no-intervención implica propiciar la salida del mercado de aquellas empresas tamberos que no cuenten con una escala acorde a los precios de mercado de la leche.