Finalmente llegó el ¡boom! ganadero: el valor de las categorÃas de invernada cayó más de un 30% medido en moneda maÃz
Por la seca y la suba del precio interno del cereal.
La devaluación –que promovió un ajuste importante en los valores del maÃz– junto con la mayor oferta de animales provocada por la sequÃa siguen promoviendo reducciones del valor de la hacienda.
Los precios promedio negociados en el remate que se realizó en el presente mes de abril en el Rosgan fueron de 39,5 $/kilos para los terneros y de 37,3 $/kg para las terneras. Ambas categorÃas –medidas en valor maÃz– registraron una caÃda del 31% y 33%, respectivamente, versus abril de 2017.
En la misma lÃnea, los novillos de uno a dos años, con un valor promedio de 34,8 $/kg, cayeron un 31%, lo que implica que, mientras que en abril del año pasado se podÃan comprar –en promedio– 13,7 kilos de maÃz con un kilo de novillo, ahora sólo se pueden adquirir 9,5 kilos. La vaca de invernada, con un promedio de 17,8 $/kg versus 18,2 $/kg un año atrás, cayó 37% en términos relativos.
El valor de las vacas con garantÃa de preñez se derrumbó al registrar, siempre en moneda maÃz, una caÃda interanual del 48%% al negociarse a un promedio de 10.061 pesos versus 12.436 pesos en abril del año pasado.
El director del Rosgan, Raúl Milano, indicó “en la franja central del paÃs se siente el impacto de la seca y las decisiones productivas y económicas se mueven al compás del clima a excepción de las provincias del norte, que tuvieron lluvias lo suficientemente importantes para garantizar pasturas subtropicales Gatton Panicâ€.
“Las lluvias de los últimos dÃas permiten pensar en los cultivos de la fina y la posibilidad que la implantación de verdeos de invierno mitiguen la ausencia de reservas, pero en el mientras tanto se adelantan todas las salidas de excesos de carga en los camposâ€, señaló Milano por medio de un comunicado.
“Este remate que tuvo un gran volumen, con más de 26.200 cabezas, registra un resultado entendible por la abundancia de oferta, con más de 17.600 cabezas exclusivamente de terneros y terneras, que debieron sortear la demanda de un sistema de confinamiento demasiado abastecidoâ€, finalizó.