Basta de intendentes que usan la tasa vial como caja polÃtica: por una ley de autogestión de caminos rurales
Pedido del presidente de la Federación de Acopiadores.
Sin caminos rurales no existe posibilidad de comercializar la producción agropecuaria de la que depende la mayor parte de la generación genuina de divisas. Cierran tambos. Transportistas tienen menos trabajo. Los productores experimentan problemas financieros. Se generan distorsiones comerciales porque las industrias no reciben los insumos necesarios para poder operar con normalidad. La gente que vive en pequeños pueblos queda eventualmente aislada y debe ser socorrida.
Los caminos rurales, en una nación como la Argentina, deberÃan ser una cuestión de Estado. Por ese motivo, en mayo del año pasado propuse implementar una ley que obligase a los municipios a crear instituciones –cooperativas o comisiones– para que los propios usuarios de los caminos rurales puedan destinar al menos el 70% de la recaudación total de la tasa vial al fin especÃfico para el cual fue creada la misma (y no para financiar recitales ni actos polÃticos ni cualquier otro propósito).
Ya existen iniciativas exitosas, en ese sentido, en los departamentos bonaerenses de Tandil, Benito Juárez y Coronel Suárez. Pero se necesitan caminos rurales transitables en todas las regiones de todas las provincias de base agropecuaria. No sólo en algunos sectores.
“Creo que para lograr una correcta asignación de recursos es imprescindible que una ley provincial obligue a los municipios a que el mantenimiento de los caminos rurales sea supervisado por comisiones de productores, a fin de evitar el desvÃo de fondos, actitud común en la enorme mayorÃa de los municipiosâ€, solicitó hoy el presidente de la Federación de Acopiadores, Fernando Rivara, durante la apertura del evento “A Todo Trigoâ€.
Se necesita que muchos más dirigentes del ámbito agroindustrial se sumen al pedido porque la mayor parte de los intendentes de las principales zonas agropecuarias del paÃs no van a querer soltar la caja de tasa vial.
Si el pedido, incluso, es realizado por toda la comunidad agroindustrial en su conjunto, no le va a quedar otra a la corporación polÃtica que aceptarlo. Quejarse en Twitter, posteando fotos de caminos intransitables cuando caen algunas gotas, es gratis. Pero no sirve de nada.
Ezequiel Tambornini