Argentina paÃs cárnico: el consumo de proteÃnas animales se mantiene estable a pesar de la crisis económica
Según datos oficiales del primer bimestre del año.
El consumo de proteÃnas cárnicas por parte de los argentinos se mantiene en niveles estables a pesar de la reducción de la capacidad adquisitiva promedio de la población generada por la recesión económica.
El consumo aparente de proteÃnas cárnicas por parte de los argentinos –considerando las tres principales fuentes– en el primer bimestre de 2019 fue de 111,8 kg/habitante/año, una cifra 0,6% inferior a la del mismo perÃodo del año pasado, pero 1,3% mayor a la de enero-febrero de 2017.
En los dos primeros meses de este año, debido al ajuste de precios producido por el cambio de ciclo ganadero, el consumo interno de carne vacuna estimado por la SubsecretarÃa de GanaderÃa de la Nación es de 53,8 kg/habitante/año versus 59,5 y 55,4 kg/hab/año en el mismo perÃodo de 2018 y 2017 respectivamente (ver gráfico).
El redireccionamiento de la oferta de carne bovina hacia el mercado externo permitió un crecimiento del consumo interno de carne aviar (industria que no tiene una competitividad externa tan elevada como la de los frigorÃficos vacunos).
En los dos primeros meses del año los argentinos consumieron 44,0 kg/habitante versus 39,0 y 42,0 en el mismo lapso de los últimos dos años, mientras que en el caso de la carne porcina se mantuvo en 14,0 kg/habitante, el mismo nivel que en enero-febrero de 2018 pero superior a los 12,0 kg/habitante del primer bimestre de 2017.
La cultura argentina está indisolublemente asociada al consumo de proteÃnas cárnicas en general y bovinas en particular, de manera tal que, frente a restricciones económicas, los argentinos recortan otros gastos para mantener la carne en su mesa.