“Si no trabajamos en conjunto va a ser anárquica la próxima inundaciónâ€
La visión del especialista José Crotto.
“En medio de una inundación no se puede solucionar nada: cada uno busca salvarse como pueda. Las soluciones tienen que planificarse cuando no hay inundación y en esto o trabajamos en conjunto o no solucionamos nada y va a ser anárquica la próxima inundaciónâ€.
Asà lo indicó José Crotto, agrónomo bonaerense dedicado a estudiar la gestión hÃdrica de la zona pampeana –quién próximamente publicará un libro sobre el tema– durante una charla sobre manejo de las inundaciones ofrecida hoy jueves en la Expo Rural de Palermo.
“Creo que el Plan Maestro de la Cuenca del Salado está mal hecho. Y si está mal hecho algo que nos están diciendo que está fantástico y que es la mejor obra que se está haciendo en la provincia de Buenos Aires, con alrededor del 2000 millones de dólares comprometidos, entonces tenemos verdaderamente un problemaâ€, disparó.
Crotto explicó que el Plan Maestro, además de considerar un régimen de precipitaciones inferior al actual, contempla los aportes provenientes solamente de la Cuenca del Salado sin advertir las enormes masas de agua que ingresan de otras provincias.
“La nueva cuenca se extiende hasta San Luis, es mucho mas grande, comprende unas 28 millones de hectáreas y, por lo tanto, requiere sacar más agua de lo que se proyectó originalmenteâ€, aseguró.
Crotto indicó que existen muchos puentes mal diseñados, como los de La Postrera y Guerrero (cruce de la Ruta Nacional 2 con el rÃo Salado), que actúan como “tapones†de los flujos de agua en situaciones de excesos hÃdricos.
En lo que respecta a los reservorios de agua presentes en la provincia de Buenos Aires, señaló que algunos están bien diseñados –como por ejemplo el de la laguna Mar Chiquita–, mientras que otros fueron desvirtuados para transformarlos en atracciones turÃsticas.
“Cada intendente tiene interés en que venga gente de afuera a pescar a su pueblo y entonces a los reservorios le ponen una traba para taponar la salida (de agua) y mantenerlos lo más llenos posible; eso sirve para que vengan turistas, pero no como reservorio en caso de excesos hÃdricos. La Dirección Provincial de Hidráulica de la provincia de Buenos Aires no está trabajando bien en estoâ€, señaló.
Definió la situación presente en la laguna de La Picasa como “un disparate†al inutilizar miles de hectáreas en la zona agrÃcola más productiva de la Pampa Húmeda y provocar el corte permanente de la Ruta Nacional 7. “Con la sequÃa de 2018 se podrÃa haber solucionado el problema de La Picasa, sacando agua hacia el Salado, pero no sacó una sola gotaâ€, reclamó.
Crotto aseguró que buena parte del agua presente en La Picasa proviene de canalizaciones realizadas en la provincia de Córdoba, que también comenzó a derivar excesos hÃdricos hacia La Pampa.
“Córdoba hizo trampa: tiene la habilidad de moverse más rápido que sus vecinos en este tema y se está sacando agua de encima porque no quiere inundar tierras que ahora son mucho más productivas. Cortando lomas de maizales desvió agua hacia La Picasa, mientras que por medio del rÃo Popopis (rÃo Quinto) envió excedentes a La Pampaâ€, afirmó.
Crotto dijo que los bonaerenses creen que están protegidos de los excesos provenientes de Córdoba gracias al Camino del Meridiano, algo que –consideró– es relativo porque, en situaciones de inundaciones, los habitantes de La Pampa van a intentar derivar los excesos hÃdricos.
“Bragado es un peligro en potencia porque es una ciudad donde en algún momento va a comenzar a recibir agua de diversos frentesâ€, alerto Crotto en referencia a las obras que se están llevando a cabo para derivar hacia esa región mayores flujos de agua sin una correspondiente infraestructura que permita asegurar una salida equivalente de excesos hÃdricos.
“El problema se agrava por los puentes chicos (que cruzan el rÃo Salado), como es el caso del presente en Alberti-Pla, que no va a permitir pasar el agua en situaciones de excesos hÃdricos y va a inundar miles de hectáreas productivasâ€, proyectó.
Crotto solicitó implementar un plan hidráulico integral, que considere los flujos de agua proveniente de toda la extensión de la cuenca pampeana, para evitar problemas en la próxima inundación. “Si vamos a tener que convivir con más agua, entonces tendremos que hacer las obras necesarias para sacar más agua; no existe otra maneraâ€, concluyó.