¿Qué alternativas existen para evitar la depreciación del peso argentino?
Dentro de varios problemas (o oportunidades de crecimiento) que enfrenta la Argentina, el déficit fiscal y la disminución de las reservas del Banco Central (BCRA) hacen podio en términos de peso especÃfico y abordaje estratégico necesario.
Estamos en un momento delicado. La economÃa no quedó en un ciclo positivo de manos del gobierno anterior y la única herencia positiva (en términos macroeconómicos) fue un balance fiscal más ordenado que se desmadró este año por la pandemia de Covid-19.
Es difÃcil creer que el gobierno argentino no tenga un plan y es, a la vez, preocupante inferir que existe más de uno dentro del mismo gobierno. Los dÃas que “pueden circular las personas con DNI que termina en número par†tenemos arreglo con los bonistas, negociaciones con el FMI y reuniones con el sector agroindustrial para fomentar exportaciones y generación de divisas. Por otro lado, “los dÃas en los que pueden circular los ciudadanos con DNI que termina en número impar†se pretende expropiar VicentÃn SAIC, intervenir la Justicia y diseñar un presupuesto nacional que mencione aumento de impuestos como única alternativa viable. Tales incongruencias no constituyen, por cierto, terreno fértil para construir confianza.
Cuando uno mira los números en Argentina sale a relieve la necesidad primaria de aumentar las exportaciones, disminuir el déficit fiscal y acumular reservas, pero, como contrapartida, nos encontramos con el paradigma del gasto público intocable (por supuesto, hay quienes necesitan asistencia y otros que no, pero ese debate nunca prospera). Vale recordar que el Estado, en términos de Producto Bruto Interno (PBI), tiene actualmente el doble de tamaño del que tenÃa en el año 2004.
Eso, por supuesto, no es gratis. Los bonos argentinos denominados en moneda extranjera recién nacidos del canje instrumentado por el equipo económico del gobierno están cotizando con la posibilidad implÃcita de default.
Podemos estudiar variables de macroeconomÃa, como el tipo de cambio de equilibrio, pero sólo como una referencia teórica, porque ese número no tiene mayor sentido al considerar que en apenas quince años se duplicó el tamaño del Estado y que no tenemos forma de financiarnos en el exterior. En ese marco, un valor de 145 pesos por dólar en el mercado del Contado con Liquidación es barato.
La única gran fuente de divisas con que cuenta la economÃa argentina son los dólares aportados por el sector agroindustrial argentino. Es más que obvio que, si pretende aumentar el volumen de divisas por esa vÃa, deberÃan propiciarse las condiciones estructurales necesarias para aumentar la producción agropecuaria.
La tasa de interés la viene monitoreando el BCRA muy de cerca. Hoy se observa que le está poniendo un piso, más que un techo, y también parecerÃa que este BCRA va a correr de atrás a la inflación.
En tal contexto, dentro de los instrumentos en pesos disponibles para intentar protegerse de la inflación tenemos los fondos de rescate inmediato (t+0), que trabajan en torno a una tasa nominal anual (TNA) del 20%. Estos fondos los usan muchÃsimo las tesorerÃas de empresas para colocaciones de dÃas. Están formados por plazos fijos, cuentas remuneradas y cauciones bursátiles (es decir, dentro de lo más bajo en riesgo de mercado).
Dentro de la industria de fondos comunes de inversiones (FCI), hay opciones en pesos también con rescates al dÃa siguiente (t+1), que tienen un poco más de rendimiento: en torno al 23% de TNA. Estos fondos mantienen posiciones bastante generosas de lo que tienen en cartera los t+0, pero agregan otros activos como deuda pública (soberana o sub-soberana) y deuda privada, lo que les permite captar un poco más de tasa. Estos fondos no son ya recomendables para tesorerÃa, ya que pueden tener más volatilidad que los anteriores.
Por otro lado, hay FCI un poco más largos en duración y en capacidad de rescate (en 48 horas o “t+2â€), que funcionan como cobertura al dólar (dollar linked). Estos son más volátiles y capturan más retornos si se acentúa el ritmo devaluatorio, pero son mucho más estancos en caso de un avance lineal del tipo de cambio oficial. Estos FCI incluyen varios de los activos mencionados con anterioridad y otros, con el propósito de estructurar sintéticos de tipo de cambio para intentar copiar la evolución del tipo de cambio oficial. En estos casos, es muy importante estudiar la “composición de cartera†de cada FCI, dado que existen importantes variaciones que inciden en diferentes rendimientos finales.
Nunca dejamos de mencionar los viejos y conocidos plazos fijos, que trabajan en torno a un 33% TNA. No se observa posibilidad de riesgo sistémico, pero sà sabemos que presentan iliquidez durante la colocación.
Otra opción muy creciente, últimamente, a la que se puede acceder en pesos y salir de riesgo argentino, son los Cedears (certificados de depósito argentino). Este instrumento permite comprar, desde territorio argentino, acciones de empresas del exterior (como por ejemplo Microsoft, Amazon o Deere & Co.). Este activo financiero ganará rendimiento si sube el dólar contado con liquidación y si sube también el precio de la acción. Y, por supuesto, perderá valor si ocurre lo contrario. Esta alternativa es para posiciones más largas y completamente especulativas (no aplica para una tesorerÃa de empresa o para un ahorro que se tenga que utilizar dentro de los próximos dÃas).
Nicolás Burzaco. Consultor financiero. Director de Extra Milla